En la anterior entrada, hablaba de Interactivos y su marco Hack the city, pero me quiero detener un poco en la exposición en sà misma porque no tiene desperdicio alguno 🙂
Por un lado están presentes los drones ,fabricados a partir de materiales destinados originalmente para el reconocimientos aéreo y la vigilancia policial (vamos que material de verdad), es un quadcopter con GPS con wifi propia, de manera que es un infraestructura pirata “voladora”, se juntan transmiten a través de su red pirata y se dispersan, impidiendo ser detectados .En este caso actúan como una red local wifi, de manera que la gente puede subir y compartir ficheros entre partes ( p2p), cuando se interactÃa con los drones, estos cambian de color y adquieren tonos brillantes, y su vuelo se vuelve más exagerado.
Y la parte sexy, porque quien dijo que los hackers no son sexys, viene con Sentient City survival kit (que creo vendrÃa a ser algo asà como, el kit para la supervivencia en las ciudades sensibles) y está enmarcado en el hecho de que cada vez estamos sometidos a mas elementos de vigilancia, diariamente pasamos por todo tipo de dispositovs que recogen nuestra información, asà que este “kit” lo que intenta es provocar y sacar a la luz conversaciones sobre cómo queremos que sea el futuro y cómo tomar control del entorno informatizado. ¿Podremos ir creando identidades diferentes en función de la ropa interior que llevemos? ¿podremos intervenir en los sistema desde nuestra ropa más Ãntima?
La fábrica de cola, es una forma de revelarnos contra una de las más grandes corporaciones existentes, asà que en la exposición enseñan a hacerte tu propia cola, que como todo el mundo sabe en origen es una fórmula tradicional, que posteriormente fue comercializada por los malos-malotes.
Esto es sólo parte de la exposición, lo que más me llamó la atención en el corto rato que la pude ver, como en estos dÃas tendré ocasión de volver a pasarme por ahÃ, veré a ver si hay más cositas que me llamen la atención.